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EFICIENCIA

¿Cómo instalar una caldera de gas?

Instalar una caldera de gas es un proceso sencillo pero delicado, por eso debe llevarse a cabo por un experto certificado, para garantizar que se cumple con el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios y para asegurarnos de que el equipo elegido se adapta a las necesidades de la vivienda, así como de que el montaje y uso se realiza de forma que se garantice la seguridad.

Published on 30 Marzo 2023

Instalar una caldera de gas es un proceso sencillo pero delicado, por eso debe llevarse a cabo por un experto certificado, para garantizar que se cumple con el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios y para asegurarnos de que el equipo elegido se adapta a las necesidades de la vivienda, así como de que el montaje y uso se realiza de forma que se garantice la seguridad.

El factor “seguridad” es muy importante, ya que se trata de instalar y usar aparatos que están conectados a la red de gas de la vivienda para activar la calefacción y, en la mayoría de los casos, también al agua caliente sanitaria.

 

En Endesa X contamos con una amplia gama de calderas de gas y especialistas para llevar a cabo su instalación de manera segura y eficaz. 

¿Cómo se instala una caldera de gas de condensación?

 

La instalación de las calderas de condensación es más sencilla y más barata que la instalación de una caldera de gasoil. Esto se debe fundamentalmente a una razón: que las calderas de condensación son menos pesadas, tanto que podemos colgarlas de la pared, mientras que las calderas de gasoil son mucho más pesadas y tienen que estar apoyadas en el suelo. Por lo tanto, para las calderas de condensación puede ser que solo se necesite un operario, mientras que para las apoyadas en el suelo se necesitan dos.

 

La instalación de una caldera de condensación implica los siguientes procesos:

  • Desmontaje de la caldera antigua y retirada de la misma a un punto limpio.
  • Montaje de la caldera de condensación en el lugar elegido, generalmente el mismo en el que estaba la caldera anterior.
  • Llevar a cabo la conexión con las instalaciones de fontanería, gas y electricidad. Lo más recomendable es que ésta se realice mediante soldadura, pero también se puede optar por latiguillos metálicos.
  • Conexión del termostato, para poder programar la calefacción.
  • Conexión al desagüe.
  • Instalación de la salida de humos. La longitud de los tubos para esta instalación depende de las características del lugar donde se va a montar la caldera.
  • Emisión del certificado de instalación de la caldera, siguiendo la normativa vigente.

 

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¿Se puede instalar una caldera de condensación sin desagüe?

No es posible. Todas las calderas de condensación generan una serie de condensados, que deben dirigirse por un desagüe, que suele ser el de las aguas residuales.

 

Los desagües deben cumplir con condiciones específicas, ya que los condensados que se producen son ligeramente ácidos. Por tanto, en ocasiones hay que colocar filtros especiales para tratar estos condensados antes de verterlos. Esto se produce especialmente en las instalaciones de edificaciones antiguas, en las que los desagües están formados por conductos metálicos como el plomo.

 

En cambio, en las instalaciones nuevas ya no es necesario instalar estos filtros, ya que están hechos de PVC, y éste es un material resistente a los componentes de los condensados, y que no se corroe con la acidez de estas sustancias.

 

¿Dónde debe estar el desagüe de la caldera de condensación?

Lo ideal es que el desagüe de la caldera esté situado cerca de la caldera, para que la instalación implique tubos de la menor longitud posible, lo que abarata los costes y permite un funcionamiento más eficaz.

 

No obstante, si el desagüe está lejos, hay soluciones. Es posible hacer obras para conectar el tubo de la caldera con el fregadero del baño, pero esto encarece la instalación.

 

Además, no es conveniente que haya demasiada distancia entre la caldera y el desagüe, ya que esto puede provocar que no haya suficiente pendiente en el tubo que conecta ambos y, como consecuencia, se haga necesario instalar una bomba.

 

También es recomendable que el recorrido del tubo no sea ascendente. En ocasiones, esto no puede evitarse y también hay que recurrir a la instalación de una bomba. Esto, como ya mencionamos, encarece la instalación de la caldera, pero también el mantenimiento en el futuro, ya que es más larga la tubería que habrá que mantener y la bomba puede estropearse y requerir también de mantenimiento.

 

¿Qué normativa hay que cumplir para la salida de humos de una caldera de condensación?

 

Es importante que se cumpla con la normativa vigente para la salida de humos de la caldera de condensación, algo para lo que nuestros especialistas en instalación de calderas están formados y preparados. A continuación, detallamos qué factores se deben tener en cuenta.

 

La normativa vigente es el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios y ésta establece que las salidas de humo para las calderas de condensación, en los edificios de nueva construcción, se deben realizar en las cubiertas de los edificios.

 

Para los edificios antiguos, en los que esta opción no es posible, este reglamento permite excepciones. En este caso, se puede recurrir a opciones como extraer el tubo por la fachada o hacia un patio interno. Esta solución, sin embargo, solo se puede adoptar cuando se trate de calderas de gas estancas, que emitan un nivel bajo de NOx, o en las calderas de condensación con potencia nominal menor a 70 kW.

 

La potencia nominal es la potencia máxima que demanda una máquina o aparato en condiciones de uso normales.

 

¿Qué otros aspectos contempla la normativa de instalación de calderas?

 

  • Como ya mencionamos, en cualquier nueva edificación, las calderas instaladas deberán ser de condensación y estar equipadas con un termostato modulante o sonda exterior.
  • En cualquier sustitución de caldera, se deberá instalar una caldera de condensación o baja en NOx, si la salida de humos da a la fachada.
  • Se podrá instalar una caldera estanca convencional solo cuando ésta pueda ser conectada a una chimenea hasta la cubierta del edificio, aunque por normativa de fabricación, desde el año 2018 está prohibido fabricar equipos que no sean baja emisión de NOx.
  • Desde el 1 de enero del 2010 queda prohibida la instalación de calderas atmosféricas.
  • Y según la normativa europea de diseño ecológico (ERP), a partir del 26 de septiembre de 2015 se prohíbe la fabricación de calderas que no tengan un mínimo de rendimiento, lo que en la práctica casi obliga a que sean de condensación.

 

¿Qué tipo de tubos se requieren para la salida de humos?

 

Tubos de salida de humos según su estructura

 

  • Tubo coaxial

Se trata de un conducto compuesto por dos tubos concéntricos, uno exterior de 10 centímetros de diámetro y otro interior, de 6 centímetros de diámetro.

 

A través del tubo exterior, circula el oxígeno para la combustión que se introduce al sistema desde el entorno en el que está situada la caldera. El tubo interior, en cambio, está diseñado para expulsar los gases de la combustión, una vez que ésta se ha producido.

 

Este tipo de conductos es el más utilizado actualmente, ya que ocupa menos espacio y es un mecanismo muy efectivo.

 

  • Doble tubo

En este tipo de instalaciones hay dos conductos distintos: un tubo de admisión del oxígeno (el exterior en el tubo coaxial) y un tubo de extracción (el interior en el tubo coaxial).

 

Este tipo de instalación se usa cuando la salida de humos está muy lejos de la caldera, pero tiene el inconveniente de que se requieren dos conductos y ocupan más espacio.

 

Tubos de salida de humos según su ubicación

 

  • Horizontal

Este tipo de instalación es la más común en los edificios que no son de nueva construcción, ya que en éstos lo más común es que los tubos de salida de humos se dirijan hacia la fachada.

 

Este tipo de instalación está formado por un tubo vertical que se conecta a la caldera y luego un codo para girar, el cual se enchufa a un tramo horizontal.

 

El tubo horizontal debe tener una inclinación hacia la caldera, para que el agua de los condensados no caiga a la calle, sino que regrese hacia la caldera y se recoja en el desagüe.

 

  • Vertical

En este tipo de instalaciones, los tubos de salida de humos se dirigen de manera vertical a la cubierta, aunque también pueden tener salida en la fachada.

 

En los edificios, los humos se pueden llevar al tejado a través de un shunt, que es un conducto central, que llega hasta el tejado del edificio. A este shunt se conectan los tubos de cada piso.

 

Los tubos de cada piso llegan hasta la cubierta del edificio por el shunt, hay que tener especial cuidado de que no se deriven al interior de las viviendas vecinas, esto se puede hacer con antirrevocos incorporados o adicionales a la caldera.

 

Los humos en las calderas de condensación salen a temperaturas muy bajas, ya que el calor se ha aprovechado dentro de la caldera para los procesos de calentamiento del agua del circuito de radiadores y agua caliente sanitaria. Debido a esto, los tubos pueden ser de propileno, un plástico resistente y menos costoso que otros metales.

 

Como habrás podido comprobar en este artículo, instalar una caldera de condensación tiene su complejidad, por eso no se puede realizar sin la asistencia de un profesional.

 

En cualquier caso, conocer cómo funciona la instalación de una caldera de condensación te ayudará a elegir el mejor servicio de instalación y entender cómo funciona el proceso, para poder hacer las preguntas necesarias y tomar las decisiones que correspondan.

 

En Endesa X, contamos con una gama muy amplia de calderas de condensación y un equipo de técnicos especialistas en realizar este tipo de instalaciones, que te acompañarán durante todo el proceso, desde la elección de la caldera de gas adecuada para tu vivienda, hasta la instalación y el mantenimiento posterior.

 

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